TOKIO, 2 (del enviado especial de Europa Press, Ramón Chamorro)
La selección española femenina de baloncesto en silla de ruedas concluyó este jueves su histórica participación en los Juegos Paralímpicos de Tokio en la octava plaza, tras perder por 43-62 ante Gran Bretaña.
El combinado que dirige Abraham Carrión cerró en el Ariake Arena su presencia en la capital japonesa lo que era su primera participación en una cita paralímpica, sin contar la de Barcelona’92 donde se clasificó de forma automática, una experiencia que le debe servir para haber ganado experiencia y nivel competitivo de cara al futuro, empezando por el Europeo donde ejercerá de anfitriona.
España aspiraba a repetir el séptimo puesto del pasado Mundial, pero no pudo con una selección británica que se escapó ya muy pronto en el marcador. El 8-22 del primer cuarto fue clave y decantó el partido para Gran Bretaña.
De todos modos, pese a la desventaja en el marcador, las españolas no se vinieron abajo y fueron capaces de mejorar a nivel defensivo y de ganar el segundo cuarto (13-11) para mantenerse dentro del choque. Sin embargo, tras el descanso, su rival volvió a apretar y terminó por sentenciar aunque el combinado nacional también pudo ganar el cuarto final (14-9).
“Fue un partido duro e intensa en el que ellas supieron mantener su ventaja aprovechando nuestros errores. Nos quedamos con una octava plaza satisfactoria porque hemos podido trabajar y creo que lo hemos hecho relativamente bien”, admitió Isabel López, la más destacada con 13 puntos y seis rebotes.
La jugadora española reconoció que tenían “la ambición” de haber quedado más arriba, pero no escondió que eran “los primeros Juegos para esta selección desde Barcelona”. “Hemos competido y luchado y creo que la octava plaza es para sentirse orgullosas y nos pone una referencia para buscar del octavo para arriba”, sentenció.
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