LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 6 (EUROPA PRESS)
La Asociación de Empresas de Turismo Activo y Ecoturismo de las Islas Canarias, Activa Canarias, a través de algunas de sus empresas asociadas, ha colaborado en el ‘Manual de Buenas Prácticas de ciclismo en la naturaleza de Canarias’.
Según ha informado la entidad, se trata de una publicación que edita el Gobierno de Canarias a través de la Consejería de Transición Ecológica y Energía y con el liderazgo del Servicio de Medioambiente de Gesplan.
Con el asesoramiento de las áreas de medioambiente de los cabildos insulares, reservas de la biosfera, parques nacionales, federaciones o la propia patronal del turismo activo y el ecoturismo de las islas, pretende fijar el marco regulador de las actividades ciclistas en la naturaleza.
Activa Canarias ha explicado que éstas son unas actividades muy populares en Canarias, pero que pueden tener efectos negativos en el entorno, si no están debidamente reguladas.
El manual incluye las afecciones que pueden producirse en el espacio natural por esta actividad, y posteriormente propone buenas prácticas a administraciones, empresas organizadoras de pruebas ciclistas y a empresas de turismo activo. En su redacción han colaborado empresas de Activa Canarias como MTB Nido de Águilas, Canarycleta Bike Tour, Climbo y Bike Lanzarote Experiences.
Preocupados por una situación que requiere de ordenamiento para que no tenga afectación al medio natural y la práctica de otras actividades, el documento incluye casi una veintena de recomendaciones para la práctica de esta actividad, entre ellas se encuentra el conocimiento del territorio, la formación sobre biodiversidad canaria, estar informados de las especies protegidas, respetar el entorno y sus ritmos de floración, reproducción o nidificación, la promoción del transporte colectivo o la conveniencia de la realización de acciones de voluntariado y custodia del territorio.
El presidente de la asociación, José Luis Echevarría, resaltó la buena predisposición de Activa Canarias para regular todas las actividades de turismo activo, en especial las que transcurran en espacios sensibles.
“Estamos convencidos de que debe haber unas reglas del juego y que hay que defender los espacios naturales. Para ello es esencial fijar los límites de nuestra actividad y generar con la ayuda de nuestro sector las normas que permitan un uso sostenible del territorio. Los profesionales del turismo activo conocen de primera mano la realidad de las diferentes actividades y usos de los espacios naturales, formando además un amplio tejido con vocación de ayudar a la conservación y el uso adecuado del territorio”, destacó.
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